Torca del León

(PD-37 / PD-38)

Valmori, Llanes, Asturies.

Sociedad Espeleológica y Barranquista Escar, 2014-2015, 2017, 2019
Asociación Espeleo-Montañera Trasmiera, 2014
Grupo de Espeleología Diañu Burlón, 2019

Desarrollo: 1.314 m. 
Desnivel: -60 m.
Topo parcial a 31 de diciembre de 2019; exploración en curso.

Coordenadas UTM (Dátum WGS84):
        Boca PD-37: 30T, X: 351732, Y: 4807168, 127 msnm
        Boca PD-38: 30T, X: 351839, Y: 4807151, 118 msnm   

Localización: Se ubica en la ladera inferior de La Verde, no lejos de la laguna de la Marea, y se puede acceder a ella por distintas pistas y caminos desde los pueblos de Piedra, Valmori, Celoriu o Porrúa.

Descripción: La cavidad se vertebra en sentido este-oeste, con un nivel principal de galerías con el que comunican las dos bocas verticales, y otros varios niveles que discurren de modo más o menos paralelo —aunque con menor continuidad y menores dimensiones— a cotas inferiores. Posee zonas relativamente laberínticas, lo que aconseja abordar su descripción por partes.

§ A. — Galería Panthera leo y Galería de los Destellos.

Si accedemos a la red a través de la boca occidental (PD-37) nos encontramos con un pozo de 16 m, que en sus últimos metros conecta con el techo de una galería amplia con suelo de bloques, la cual progresa en descenso a este y a oeste. Hacia el oeste el pasaje se bifurca, aunque por uno u otro lado nos enfrentaremos a resaltes que aconsejan el uso de cuerda, confluyendo en una sala a un nivel inferior. Este es el inicio de la Galería del Gatu Montés que se describirá después (ver §.D). Si por el contrario descendemos hacia el este la galería amplía sus dimensiones; es el inicio de la Galería Panthera leo. Tras una veintena de metros en descenso el conducto empieza a ascender, mientras que a la izquierda y abajo nos queda un resalte que conduce al Pasaje inferior que describiremos más tarde (ver §.B). Tras una corta y resbaladiza subida tenemos una especie de trinchera perpendicular al conducto que nos obliga a un corto destrepe, y una trepada del otro lado, para salvarla. En el lateral de esta trinchera encontramos un pozo que comunica con el Pasaje inferior y una gatera arrampada que igualmente comunica con aquel. Llegamos al poco a un punto alto, a la altura del techo de la galería, más elevado que el lugar donde nos deposita la cuerda del pozo de entrada. La galería a partir de aquí vuelve a descender de forma decidida, con barro en el piso y ampliando sus dimensiones hasta formar una especie de sala. En esta sala tenemos una rampa descendente por la izquierda, que comunica con el Pasaje inferior (ver §.B) y a través de unos pozos con La Carlería (ver §.C), pero la galería principal
continúa de frente, en ligero ascenso, con bloques y concrecciones. Superado este tramo vuelve a descender y ampliar, con un par de giros poco marcados en un trecho con grandes bloques en el suelo; entre estos bloques se encuentran algunos desfondes e incluso un breve piso inferior, dejando también en este tramo de galería unas rampas con bloquera a la izquierda sin solución de continuidad. Llegamos finalmente a un resalte descendente y una pronunciada rampa que nos dejan en una especie de sala inclinada, con parte de la misma cubierta de barro y bloquera, y otra parte con coladas de brillante calcita y concreccionamiento. A la izquierda unas ventanas y resaltes descendentes nos comunican con el Pasaje inferior en la zona donde se sitúa la otra boca de la red (PD-38), y el acceso principal a La Carlería y los niveles profundos de la cavidad. Si desdeñamos estas ventanas y continuamos hacia el este, nos adentramos en la zona de concreccionamiento y coladas de calcita; es el arranque de la Galería de los Destellos, continuidad lógica de la Galería Panthera leo. Al comienzo la galería es amplia y en ligero ascenso, dejando a la izquierda una rampa descendente que conduce a un conducto vertical (el Pozu la Broca, P14 + R6) que nos deposita en un meandrito inundado que se torna impenetrable a cota -52 m. Superadas las coladas llegamos al punto alto de la Galería de los Destellos. La galería continúa de frente (este) mientras que a nuestra izquierda tenemos un desfonde o pozo de la galería que ofrece varias continuidades:
    — en su base, a la izquierda (noroeste), una gatera descendente enlaza con la cabecera del Pozu de la Broca.
    — en el medio (noreste), una ventana de este desfonde al nivel del suelo de la galería nos conduce a un conducto paralelo de menor sección que enlaza con los Pozos de la Diaclasa (P8 + P14) que nos conducen a un estrecho meandrito inferior, continuidad del situado en la base del Pozu de la Broca; este meandro hacia el oeste se vuelve impenetrable en una zona inundada a cota -52 m, mientras que hacia el este el paso se hace impracticable a cota -54 m, en una zona igualmente inundada. El conducto inicial tiene un pasaje superior con una salita y un P10 que comunica por arriba con la cabecera del P14 ya mencionado.
    — en su base, a la derecha (sureste), un pequeño nivel inferior con gateras y alguna salita se desarrolla por debajo de la Galería de los Destellos, comunicando con esta por varios puntos.
Regresando a la Galería de los Destellos, tras superar este desfonde a la izquierda, el pasaje se estrecha y queda enmarcado por algunas columnas. No mucho más allá vuelve a ampliarse a modo de pequeña sala, pero al cabo vuelve a disminuir en dimensiones. Tenemos aquí a la izquierda un P4 ciego con el fondo inundado. Más allá la galería hace un tímido intento de ampliar, pero poco más allá cierra definitivamente, cegado el conducto por una gran colada. Estamos en el extremo más oriental de la cueva, a cota -22 m. Un poco más atrás habremos dejado una rampa descendente que comunica por un paso estrecho con la base inundada del P4 antes mencionado.

§ B. — El Pasaje inferior.

Como ya se dijo en el epígrafe anterior, en el fondo de la rampa bajo el pozo de la boca PD-37, un resalte descendente nos conduce al inicio del Pasaje inferior, el cual está conformado por una serie de galerías que discurren de forma paralela a la Galería Panthera leo pero a cota más profunda. Hacia la izquierda (oeste) el conducto cierra tras un corto y estrecho tramo, a cota -28 m. Hacia la derecha (este), y con dimensiones algo más amplias, tenemos la continuación principal. Justo a su comienzo se situaba el yacimiento paleontológico de donde se han recuperado restos de león de las cavernas, leopardo, y otras faunas. El pasaje continúa hacia el este. A la derecha tenemos varios pequeños pocetes que comunican con otro nivel paralelo, más bajo y estrecho. También a la derecha, pero sobre nuestras cabezas, algunas rampas y chimeneas comunican con la Galería Panthera leo. Tras un corto trecho, el conducto principal se bifurca, ofreciendo continuidad por dos modestas galerías meandriformes. Confluyen más allá, tras un corto pero accidentado trecho, en una sala relativamente amplia que normalmente mantiene una pequeña balsa de agua; en esta sala encontramos dos pozos que sirven de conexión con La Carlería, que se describirá después (ver §.C). Poco más allá la sala conecta con una amplia rampa que le cae por la derecha, la primera conexión cómoda con la Galería Panthera leo. Sin embargo, de frente y manteniendo la cota, el Pasaje inferior prosigue con dimensiones cómodas, pero tras una veintena de metros se bifurca:
    —por la derecha prosigue el conducto principal otro trecho, hasta un resalte ascendente al que sigue una gatera. Superada esta salimos a una sala relativamente amplia; a nuestra izquierda y en ascenso por un cono de derrubios alcanzamos la base del segundo pozo de entrada (PD-38), de 13 m.
    —por la izquierda una gatera seguida de unos pasajes estrechos nos deja también bajo el pozo de la PD-38 y de inmediato en la misma sala.
Esta sala presenta en su centro un pozo (P12) de dimensiones cómodas por donde comunicaríamos con la Sala del Castrón y el extremo oriental de La Carlería (ver §.C.). Pero la continuidad más evidente es hacia el sureste, a través de un resalte ascendente, por donde ganamos la encrucijada donde confluyen la Galería de los Destellos y la Galería Panthera leo, ya descritas (en §.A), punto donde concluye el recorrido del Pasaje inferior.

§ C. — El sector de La Carlería.

Si nos situamos en la sala situada por debajo de la boca PD-38, encontraremos en el centro de la misma —como ya se dijo anteriormente (ver §.B)— un pozo relativamente amplio, P12. Si descendemos el pozo nos deposita en el extremo superior de una sala muy inclinada con el piso de bloquera, la Sala del Castrón. Un pequeño aporte de agua desciende la mayor parte del año desde una colada que hacia arriba se torna impenetrable, corriendo por la sala hasta colarse en su extremo inferior por un conducto estrecho, meandriforme y con mucho barro. Este conducto al poco se bifurca. Hacia abajo, siguiendo el agua, se convierte en una gatera, con barro en las paredes, y cantos y guijarros en el suelo. Progresa por una veintena de metros hasta una estrechez severa (punta de topografía, cota -54 m) que sólo ha sido superada por una espeleóloga; del otro lado ofrece continuidad, pero se llega a pasajes inundados que requerirán el uso de neopreno.
Si regresamos a la bifurcación antedicha y abandonamos el curso de agua, tenemos a la izquierda una continuidad algo más amplia con marcada corriente de aire. El conducto principal es ascendente, pero una gatera nos da paso a un conducto inferior que conecta con la cabecera del Pozu del Sifón, P9. La base de este pozo se encuentra inundada, y el nivel del agua fluctúa en función del régimen de lluvias, actuando probablemente como chimenea de equilibrio de conductos situados más abajo; el día que se topografió, en régimen de aguas bajas, se alcanzó en su base la cota -60 m, punto más profundo de la cavidad. Por encima del pozo una chimenea comunica con el nivel superior, el principal, que como se dijo se eleva por encima de la gatera que conduce al Pozu del Sifón. Lo hace en forma de sala arrampada con suelo de arcilla y pendants en el techo. Arriba el conducto progresa ya en horizontal hacia la izquierda (oeste): es el comienzo de La Carlería propiamente dicha. Se trata de un pasaje algo caótico en su inicio, meandriforme pero con bloques, que permite progresar a dos alturas. Salimos al trecho a un conducto algo más amplio, con pequeños gours, que tras un tramo con alguna estrechez presenta otra bifurcación: por la derecha un pasaje de corto desarrollo que cierra a cota -49 m, y un pocete inexplorado; a la izquierda un pasaje en ascenso que va girando y estrechando hasta dejarnos en el fondo de una especie de sala con dos chimeneas. Estas chimeneas conforman la base de los pozos (P15 y P9 + P6) que se sitúan en el tramo central del Pasaje inferior, ya descritos anteriormente (ver §.B). En todo este tramo de La Carlería son varias las incógnitas inexploradas.

§ D. — La Galería del Gatu Montés.

Si una vez superado el pozo de entrada de la PD-37 descendemos hacia el oeste y bajamos la vertical subsiguiente, nos situaremos, como ya se comentó anteriormente (en §.A), en una sala amplia con bloques cuyo fondo alcanza la cota -36 m: este es el inicio del eje occidental de la cueva, o Galería del Gatu Montés. La continuidad la ofrece un pasaje ascendente con bloques, meandriforme, en el extremo contrario. Subiendo por este pasaje hasta el final, a la altura del techo, alcanzamos la cabecera de un pozo (P8) que nos depositaría en una galería bastante más amplia que la que veníamos siguiendo. Poco antes de llegar al pozo tenemos una estrecha rampa descendente por la derecha que nos conduce hasta el nivel del suelo sin necesidad de descender el P8; superaremos un par de estrecheces y entroncaremos con la galería amplia, la Galería del Gatu Montés propiamente dicha, la cual tiene aquí un divertículo lateral a la derecha (noreste) que concluye a cota -36 m. Si continuamos por la galería, de dimensiones cómodas, llegaremos tras una treintena de metros a un espacio más amplio, a modo de sala. Por la izquierda y en ascenso tenemos una amplia rampa, con un pozo ciego de 10 m. Por la derecha y en ascenso tenemos un divertículo que cierra a -32 m. Y por debajo de este existen tres pozos estrechos paralelos (un P9 y dos P6 + P5) que nos dejan en una sala con barro a un nivel inferior; se desarrolla en descenso y concluye ante un sumidero impenetrable a cota -50 m. Además, esta sala en la Galería del Gatu Montés presenta un breve nivel inferior por debajo de los grandes bloques de su extremo occidental. Más allá de estos grandes bloques la galería prosigue con igual rumbo pero menguando sus dimensiones. Tras una estrechez y una pequeña sala, el conducto da un marcado giro a la derecha (norte) y se convierte en gatera en pronunciado descenso. Finaliza a los pocos metros, a cota -44 m y sin tiro de aire apreciable, conformando el extremo más occidental de la cueva.

Geología: Calizas oscuras laminadas (Formación Barcaliente) del Carbonífero Superior (Namuriense).

Paleontología: La excavación del yacimiento paleontológico descubierto en la cueva ha ofrecido restos de Panthera spelaea (león de las cavernas), Panthera pardus (leopardo), Canis lupus (lobo), así como una variada fauna de micromamíferos. Los restos de león han sido datados en 43.000 años B.P. y se corresponden con un macho de gran tamaño, en torno a 360 kg de peso. El análisis de la microfauna, por su parte, permite caracterizar un entorno boscoso en aquel momento más o menos templado (MIS 3) de la última gran glaciación. Referencia bibliográfica: 
Álvarez-Lao, D.J., Álvarez-Vena, A., Ballesteros, D., García, N. & Laplana, C.  A cave lion (Panthera spelaea) skeleton from Torca del León (NW Iberia): Micromammals indicate a temperate and forest environment corresponding to GI-11 (MIS 3). Quaternary Science Reviews, 229 (2020).

Toponimia: El nombre de Torca del León no es tradicional, sino puesto por los exploradores tras el descubrimiento de los restos paleontológicos que albergaba la sima.

Han participado en los trabajos: Victoria Álvarez Vena, Zaida Álvarez Vena, Sergio Estrada González, José C. Gutiérrez Félix, Carla Gutiérrez Meré, Nidia Llamazares Campillo, Mª Esther Llut Mañueco, Julio A. Montes Campos, Joaquín Pérez San José, Juan Carlos Riobello Amador, Gonzalo Sánchez Herrero, Pablo Solares Villar (S.E.B. Escar), Emma Prieto (A.E.M. Trasmiera), Pedro J. Almeida Esteban, y Susana Gutiérrez Ezama (G.E. Diañu Burlón). El dibujo de la topo y la presente reseña son autoría de P. Solares.

- Topografía -



- Exploración en curso -